“ESTE ES EL TIEMPO DE DIOS”

                           Sor Lucia: 13 de Julio de 1917 en la cueva de Iría-Fátima



Vi a un obispo vestido de blanco.... subir una montaña empinada, en cuya cumbre había una gran Cruz de maderos toscos como si fueran de alcornoque con la corteza; el Santo Padre, antes de llegar a ella, atravesó una gran ciudad medio en ruinas y medio tembloroso con paso vacilante, apesadumbrado de dolor y pena, rezando por las almas de los cadáveres que encontraba por el camino; llegado a la cima del monte, postrado de rodillas a los pies de la gran Cruz".

-Sor Lucía 13 de julio de 1917 en la Cueva de Iria-Fátima.


Cuanto necesitamos escuchar a los profetas, en este tiempo, todos queremos seguir corriendo en un mundo que ya no será el mismo. El mundo tal y como lo conocimos quedara atrás, y ha llegado la hora de detenernos a  reflexionar y pensar. Deseamos seguir haciendo lo mismo a través de algo que nos inventamos “EL MUNDO VIRTUAL” los políticos quieren seguir en la política en las redes,  los cantantes invitan a un concierto virtual, los médicos privados anuncian  su servicio a través del internet, nos envían a la casa para hacer el trabajo en línea, los restaurantes venden sus servicios en línea, no QUEREMOS DETENERNOS!!! Seguimos corriendo, cuando la misma naturaleza nos manda un aviso que se está recuperando del mal que le hemos hecho!!! todos esperamos que esto NO se detenga y que el mundo siga igual que antes, pero todo no es más que un engaño, nunca volverá a ser lo mismo, todo lo que hemos creado nos ha llevado no solo al progreso y al desarrollo sino que también nos ha llevado a la desconfianza, un mundo que es irreal y que no nos sentimos seguros de nada. Hoy se dice que los más viejos serán los más perjudicados en esta pandemia. Y que lamentable, porque son precisamente a ellos los que necesitamos por su experiencia y sabiduría .
Todos nuestros ancianos se llenaron de VALENTÍA CORAJE ENTUSIASMO Y FE para construir este mundo con sus propias manos con su sudor y su sangre, solo ellos con su conocimiento pueden ayudarnos, este es el tiempo de Dios, y hay que parar de esa carrera y unirnos Todos,  dejar atrás nuestras diferencia y pensar en  el interés común de esta tierra que es la NUESTRA.
Libro del Génesis

12 Dios le dijo a Abram:
«Deja a tu pueblo y a tus familiares, y vete al lugar que te voy a mostrar. 2 Con tus descendientes formaré una gran nación. Voy a bendecirte y hacerte famoso, y serás de bendición para otros. 3 Bendeciré a los que te bendigan, y maldeciré a los que te maldigan. ¡Gracias a ti, bendeciré a todas las naciones del mundo!»
4-5 Abram obedeció a Dios y salió de Harán, y no se detuvo hasta llegar a la región de Canaán. Se llevó a su esposa Sarai, a su sobrino Lot, a los esclavos que había comprado en Harán, y todo lo que tenía. En ese entonces Abram tenía “SETENTA Y CINCO AÑOS”